Como todos sabemos, el coronavirus sigue azotando a todo el mundo por igual, y aunque los contagios hayan menguado y parezca que poco a poco estamos volviendo a la normalidad, no podemos olvidarnos de que sigue ahí y debemos prevenirlo.
El llamado COVID-19 se propaga por las gotas respiratorias y por el contacto con secreciones infectadas, es por eso, que cualquier profesional del sector odontológico, debe tomar estrictas medidas para prevenir tanto a profesionales como pacientes, donde la distancia de seguridad suele ser inferior a 1 metro.
La COEC entre otros, ya ha aportado información científica así como ciertos protocolos de actuación para esclarecer las dudas de clínicas dentales que van a abrir pronto para realizar urgencias.
Posibles focos de contagio en una clínica dental
En primer lugar, como ya hemos dicho, por razones obvias, el trabajo de un dentista se desarrolla a una distancia inferior a 1 metro, y si no se toman medidas estrictas, pueden traspasar gotas respiratorias.
Por otro lado, precaución en el momento en el que el personal pueda tocar superficies infectadas y luego se las traspasa a pacientes.
La principal preocupación es la generación de aerosoles que contienen saliva, sangre, y si es el caso, el virus. Solo hace falta una minúscula gota para contagiar a una persona.
Pero tranquilos, todo esto se puede prevenir con las siguientes medidas de protección.
Por lo que si alguien ha de acudir a un dentista por fuerza mayor, lo podrá hacer con todas las garantías.
Consejos y medidas de prevención
- Consejos y medidas de prevención
- Programar visitas escalonadas para evitar que los pacientes coincidan en la sala de espera. También es importante que vengan a la hora exacta que se les ha citado, ni antes, ni después para evitar aglomeraciones.
- Intentar en la medida de lo posible, que los pacientes acudan solos y sin acompañante a la clínica.
- Contactar previamente con los pacientes para consultar si han tenido algún episodio de fiebre, resfriado, tos seca, dolor en el pecho en los últimos 15 días, etc. y si han estado en contacto con personas infectadas.
- Tomar la temperatura a los pacientes que lleguen a la visita.
- Quitar de la sala de espera todo tipo de periódicos, revistas o folletos y desinfectar todo. Sillas, reposabrazos, manetas, puertas, suelo, etc.
- Proteger al personal de recepción con una mampara protectora.
- Los pacientes y acompañantes deberán lavarse/desinfectarse las manos antes y después del tratamiento.
- El personal deberá llevar gafas de protección y visera, guantes de látex, gorro y mascarilla quirúrgica de un solo usan (las típicas 4-5 capas).
- Aunque si se usan mascarillas FP, es imprescindible tener presente que desde el primer paciente podrían estar infectadas y por tanto, debemos evitar tocar la parte externa de las mismas. Siempre nos las debemos quitar por las gomas para no tocar la cara.
- Desinfectar todas las impresiones, pruebas y registros enviados desde las clínicas dentales a los laboratorios.
- Ser minucioso con todo el instrumental y los objetos de las superficies de trabajo, alejarlos del radio de contacto con saliva del paciente y guardarlo rápidamente en los cajones una vez se finalice el trabajo con los mismos.
- Desinfectar químicamente o con UV el material no esterilizable y las prótesis dentales antes de ser utilizadas.
Estas son solo algunas de las advertencias que han contemplado la COEC y otros colegios del sector que hemos querido recoger en Escola Pejoan a modo de advertencia para todos los profesionales del sector. Y así lo explicamos a nuestros alumnos del fp en higiene bucodental, en el fp de prótesis dentales y en el curso CAD/CAM.
No obstante, recomendamos a todo aquel que precise de toda la información, se lea el informe completo elaborado por los colegios oficiales.